Según un estudio llevado a cabo por Scientific Reports, los caballos son capaces de reconocer las emociones humanas a través de la expresión facial y el tono de voz. Al ser animales muy emocionales, cariñosos y sociales, algunos expertos en coaching han empezado a apoyar sus terapias con estos animales, que utilizan a la perfección la premisa de este método del ‘aquí y ahora‘.
Elena Mérida es coach emocional, formada en coaching asistido con caballos. Tras numerosos años trabajando con estos animales, destaca su «extraordinaria sensibilidad y la sorprendente facultad de percibir nuestras verdaderas emociones y sus reacciones». El motivo por el que sirven de ayuda en este tipo de terapias es debido a que, según Elena, «el comportamiento que tienen ante nosotros nos ayuda a tomar conciencia y comprender la dinámica de nuestras interacciones sociales, nuestros límites personales y nuestro estilo comunicativo».
El coaching con caballos resulta especialmente efectivo para reforzar la autoestima, ya que es «un animal que no manipula nada de su realidad, no juzga ni reflexiona más allá de los sentimientos de su propia naturaleza», por lo que se considera que puede ser de gran ayuda para generar un autoconocimiento en aquellas personas que buscan lograr un crecimiento personal.
Para Elena Mérida, el coaching tiene un objetivo principal: «poner conciencia, trabajar y potenciar el autoconocimiento, la gestión emocional, el liderazgo o la comunicación». Es por esto por lo que considera que el trabajo conjunto con caballos genera un ambiente y un aprendizaje que le aporta a la persona resultados muy positivos.
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